Imagina que tus muebles de cocina son como tu piel. Necesitan atención para mantenerse saludables y brillantes. Para nutrirlos, necesitas limpiarlos con un jabón suave y agua. Después, puedes usar un aceite especial para madera, como aceite de oliva o aceite de linaza. Esto ayudará a que la madera se mantenga suave y protegida.
Recuerda, no uses productos fuertes o abrasivos, ya que pueden dañar la madera. Y si hay manchas, limpia con un paño húmedo y un poco de jabón. Si tienes dudas, consulta a un profesional que se dedica a cuidar muebles de madera.
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